Una oportunidad para crear conciencia sobre los trastornos bipolares y eliminar el estigma social asociado al diagnóstico y su tratamiento.
Los Trastornos Bipolares se caracterizan por episodios depresivos que se alternan con otros de exaltación del ánimo (llamados maníacos o hipomaníacos, según la gravedad), de forma muy distinta a una simple inestabilidad anímica. Estas fluctuaciones persistentes en el ánimo y en el nivel de energía llevan a una alteración en el funcionamiento social o laboral, impactando tanto sobre la vida de quienes lo padecen como en la de sus familiares, amigos y cuidadores.
Los especialistas de INECO, brindan las claves para conocer más sobre la enfermedad, que generalmente comienza a manifestarse entre los 15 y 30 años de edad y es una de las principales causas de discapacidad en personas jóvenes.
En conmemoración del nacimiento de Vincent Van Gogh, de quien se cree que padecía el trastorno, la International Society of Bipolar Disorders estableció esta fecha para generar conciencia sobre su impacto en la vida de quienes lo padecen y sus familias.
CAUSAS: El curso de la enfermedad es muy variable y afecta en forma significativa la calidad de vida y las posibilidades de realización de las personas afectadas. Al momento, sus causas no están claras, pero, según indica el Dr. Julián Pessio (MN 126.916), coordinador de la Clínica de tratamiento de pacientes con Trastorno Bipolar de INECO, se debería a complejas disfunciones en la dinámica cerebral, determinadas en la mayoría de los casos por una predisposición genética.
¿Existen diferentes tipos de Trastornos Bipolares? En los equipos especializados actualmente se trabaja con una clasificación que al menos acepta cuatro tipos diferentes de Trastorno Bipolar. La forma más conocida, aunque no la más frecuente, es el Trastorno Bipolar Tipo I, en el que se combinan episodios depresivos con episodios maníacos completos. Por el contrario, la manifestación más frecuente es el Trastorno Bipolar Tipo II, en el que predominan netamente los episodios depresivos, que se combinan con episodios hipomaníacos.
El retraso en el diagnóstico es uno de los mayores problemas en el Trastorno Bipolar porque se asocia a una peor evolución, con mayor impacto sociolaboral y menor calidad de vida. Más de la mitad de las personas con trastorno bipolar deben esperar varios años desde que realizan la primera consulta hasta tener el diagnóstico y tratamiento adecuado.
Entonces, ¿cómo saber si soy bipolar? "Como dijimos, el diagnóstico no es sencillo, es por ello que debe ser realizado por expertos en el tema y con minuciosas entrevistas clínicas con el paciente y con sus familiares, ya que no contamos todavía con estudios complementarios de laboratorio y/o imágenes que puedan confirmarlo", explica la Dra. Clara Rodríguez, médica psiquiatra, integrante del Programa de Reactivación Funcional para pacientes con Trastorno Bipolar de INECO.
¿En qué consiste el tratamiento? Se requieren fármacos estabilizadores del ánimo, tratamiento psicoterapéutico y, de ser necesario, rehabilitación cognitiva", finaliza Julián Pessio.