Hoy, 6 de septiembre, se celebra el Día Internacional de la Medicina Estética, un campo que despierta cada vez más el interés de la sociedad y que ha tenido un gran crecimiento en los últimos años, a la vez que se ha consolidado su nivel científico, tecnológico y humano.
Esta rama de la Medicina tiene por objeto no sólo la mejora de la imagen, sino también la prevención de enfermedades, la búsqueda del bienestar y el envejecimiento saludable, permite unir los conocimientos médicos y avances tecnológicos a la belleza.
Si bien, cada vez son más las personas que deciden ponerse en manos de un Médico Esteticista para mejorar su aspecto, prevenir el envejecimiento o recuperar su figura, todavía, a nivel social, existen algunos tabúes, mitos y reticencias. Por eso, este día también es un día dedicado a clarificar a la sociedad los beneficios de esta práctica médica, de recordar y fomentar las indicaciones de la Medicina Estética que es la prevención del envejecimiento prematuro.
Botox®, rellenos de ácido hialurónico, bioestimuladores, hilos tensores, son nuevos conceptos que escuchamos cada vez más en boca de sus usuarios que aumentan a un ritmo acelerado.
Pero… ¿Qué factores impulsan a las personas a realizarse algún retoque estético? ¿Se trata de pura vanidad o hay otras cuestiones de fondo?
Es cierto que sigue habiendo un debate sobre si someterse a un tratamiento médico estético con el objetivo de mejorar u optimizar el proceso de envejecimiento es una frivolidad. Por eso, muchas personas prefieren no contar que se han sometido a uno u otro tratamiento
En el caso de los varones, las presiones son aún más insistentes, pues la belleza se ha considerado históricamente una preocupación propia de las mujeres, pero esto, por fortuna, está cambiando.
Un estudio científico, publicado en la revista Aesthetic Surgery Journal, ha analizado los aspectos psicosociales relacionados con este tipo de tratamientos y ha concluido que los beneficios, principalmente de los procedimientos de rejuvenecimiento facial, se extienden más allá de la experiencia física.
Según desvela dicho estudio, la medicina estética tiene el potencial de contribuir a mejorar el sentimiento general de bienestar de los pacientes, que aseguran haber mejorado tanto su bienestar psicológico como su confianza social, es decir, sus relaciones sociales y su forma de interactuar en la sociedad.
Cada día, los Médicos Esteticistas, tratan con personas que les abren su intimidad, por eso deben responder no sólo con profesionalidad, sino con sinceridad y humanidad, que los llevan a entender la necesidad de cada paciente con el corazón.
Los tratamientos más demandados son los faciales, pero los corporales les siguen de cerca. En cuanto al perfil del usuario de medicina estética, el femenino sigue predominando, pero los últimos años han demostrado un aumento en el número de hombres que recurren a ella.
La evolución de tratamientos ha permitido que los pacientes vean en estas técnicas un medio para conseguir una belleza natural y lograr así la mejor versión de ellos mismos. Ello sin duda contribuye a fortalecer la autoestima, la seguridad y la confianza individual y ello tiene un reflejo en el plano personal y laboral. Vernos bien nos ayuda a sentirnos bien.
Dra. Ivana Bonilla - Médica especialista en Medicina Estetica - MN 176787 MP 554343 - Centro Médico Rawson - cmr.drapp.com.ar - Tel. 03489-290440 / Whatsapp: 03489-555606
